Hace unos días tuve el privilegio de viajar a Austin, Texas, para asistir a un Seminario Fulbright organizado por el Instituto de Educación Internacional estadounidense y financiado por el Departamento de Estado Americano. Bajo el título de «Civic Engagement – Youth Engagement and Empowerment». Este Seminario exploraba la forma de involucrar a la juventud dentro de una comunidad, brindándonos experiencias llevadas a cabo en la ciudad de Austin.
A través de numerosas actividades y experiencias, charlas, visitas, e incluso trabajo de voluntariado, los que tuvimos la suerte de asistir pudimos desarrollar una mejor comprensión de la vida y cultura americana y la evolución de las políticas públicas para ilusionar y motivar a diferentes sectores sociales. Austin sirvió de escenario clave y pudimos descubrir cómo actualmente esta ciudad se ha comprometido decididamente con el estrato poblacional más joven, además de ser capital mundial de la música en directo.
De tremendo valor fueron asimismo las excelentes visitas que realizamos, incluyendo el moderno ayuntamiento de Austin, donde fuimos calurosamente acogidos y resolvieron todas nuestras preguntas, que fueron muchas. Al día siguiente sin embargo tocó trabajo de voluntariado, y los fulbrighters nos dividimos en tres grupos para asistir a diferentes actividades. En mi caso, el autobús nos dejó en la Escuela de Primaria Cunningham, donde pudimos observar el trabajo de jardinería y agricultura que realizan allí sus alumnos. Fue sobrecogedor ser testigo de la ilusión que dedican en sus proyectos, y muy reconfortante el hecho de haber puesto nuestro granito de arena en acabar un nuevo espacio de cultivo. Mi parte en la obra: ¡Pico y mucha pala!
Todas mis expectativas se han cumplido con creces en este Seminario. De él me voy con un entendimiento mucho más completo de los Estados Unidos. Y del resto del mundo fuera de Estados Unidos, también. Haber disfrutado de la compañía de un centenar de fulbrighters de más de cuarenta países diferentes no tiene precio. Sus intereses, preguntas y comentarios, en los que reflejaban su propia perspectiva cultural revalorizó el programa de charlas y presentaciones de este Seminario. Y por supuesto las prolíficas conversaciones informales, que sin duda cumplen con el objetivo primero del programa Fulbright, ayudar al entendimiento entre las culturas del mundo y su gente.
Miguel Camacho es Inspector y miembro de la escala ejecutiva del Cuerpo Nacional de Policía
Becario Fulbright 2014 en UCLA