El pasado jueves 18 de Febrero, de buena mañana, subía a un Uber dirección al aeropuerto de La Guardia, preparado para abandonar La Gran Manzana durante unos días. Me acompañaba Ernest, mi compañero de piso en Nueva York y también Fulbrighter. Ambos habíamos sido invitados a participar en un «Enrichment Seminar» en Denver, Colorado. El tema del seminario: «Democracy in Action: US Politics & Elections». Aunque la política no es uno de los temas que más me entusiasma, las expectativas eran altas. Sabía que, durante los siguientes 3 días, me reencontraría con otros estudiantes que había conocido en Agosto durante la semana de orientación. También sabía que conocería gente nueva: Fulbrighters de todo el mundo que, como yo, están estudiando en Estados Unidos.
El despegue desde la Guardia es espectacular. Tuve la oportunidad de ver Manhattan desde el aire por primera vez. Central Park es sin duda lo que más destaca: un rectángulo verde rodeado de rascacielos. El aterrizaje en Denver fue sorprendente: parecía que aterrizábamos en mitad de un desierto. El aeropuerto de Denver es uno de los más grandes del mundo, con una superficie de más del doble que la de la isla entera de Manhattan. Al llegar, subimos a un SuperShuttle que nos llevó hasta el hotel.
En el hotel conocí al que iba a ser mi compañero de habitación durante el fin de semana: Faizan Shafique, de Pakistán. Inmediatamente nos preparamos para asistir al primer evento. Subimos en autobuses y fuimos al Museo de Historia de Colorado, donde, después de visitar el museo, disfrutamos de la cena de bienvenida. Durante la cena, recibimos charlas en las que se introdujo el sistema electoral americano. Entre los ponentes había miembros del Departamento de Estado, periodistas y uno de los 12 miembros nombrados por el presidente de EEUU para formar parte del J. William Fulbright Foreign Scholarship Board (FFSB).
El viernes por la mañana recibimos charlas del IIE (Institute of International Education) sobre procesos que debemos seguir para renovar nuestra beca Fulbright para el segundo año. También asistimos a un panel sobre el estado actual de la política americana, en el que participaban una asesora política, dos profesores de universidad, y el alcalde de Lakewood, Colorado. Comimos en el hotel, y por la tarde fuimos a visitar Red Rocks, un parque natural a las afueras de Denver. El paisaje en Red Rocks es muy peculiar: me recordaba a las imágenes que había visto del Gran Cañón del Colorado: todo lleno de rocas rojas enormes. También visitamos el famoso anfiteatro natural, donde, en los últimos 100 años han actuado los grupos de música más reconocidos a nivel mundial. Ese mismo día, después de la visita a Red Rocks, nos separaron en grupos de 5-6 estudiantes, y fuimos a cenar con una familia de denverianos. Esta cena fue sin duda una de las mejores experiencias del seminario.
El sábado era el último día. Por la mañana nos separaron en seis grupos para hacer servicio a la comunidad. En mi caso fui a Marion Downs: un centro que ofrece recursos, servicios y educación a personas sordas o con dificultades comunicativas. Durante la visita, ayudamos a preparar actividades para niños con dificultades comunicativas. Finalmente, esa tarde celebramos el evento más importante del fin de semana: una simulación de elecciones, donde elegimos a nuestra presidenta. Y, para culminar el fin de semana, fuimos a cenar todos juntos a un restaurante como despedida.
Este tipo de eventos me ayudan a darme cuenta de que Fulbright es mucho más que la oportunidad de estudiar en una buena universidad, o descubrir un país nuevo. Es hacer amigos de todo el mundo: con culturas y tradiciones muy distintas a las tuyas pero que, sin embargo, comparten contigo muchas más cosas de las que pensabas. Es crecer, tanto en el ámbito académico como en el personal, y descubrir, a través de estas personas, cómo es el mundo en el que vivimos.
Pedro Pérez Sánchez
2015-16 Becario Fulbright/Telefonica – Columbia University, Graduate School of Engineering and Applied Sciences
